26 de noviembre de 2012

Crónica de la Nueva Edad (26/11/2012)



Una suerte de anticlímax presidió la noche electoral en las calles y en los medios afectos al Nuevo Régimen. La avalancha que se preveía, lejos de producirse, se transformó en una catástrofe para el aprendiz de brujo Artur Mas: el gris tecnócrata no convenció con su indumentaria de Moisés y los independentistas prefirieron el original al converso, ERC a CiU.

La perplejidad era tal que TV3 hasta atizó por unos instantes el fantasma de las "irregularidades detectadas en algunas mesas", con la representante de Solidaritat per la Independència hablando de los "apoderados del PP venidos desde España", ante lo inesperado del desenlace que se anunciaba. Cuando por fin se recompusieron se pasó al discurso de la "pluralidad" y sólo hacia el final del escrutinio, cuando la ley d'Hondt hizo pasar a ERC por delante del PSC y CiU alcanzó los 50 escaños, la relectura salvadora les reanimó. Es más, el final del recuento desató una cierta euforia independentista pero más bien escasa. Algunos petardos (pocos) y algunos gritos en lugar de una multitud desfilando por las calles, al menos en Gràcia. Tal vez porque para algunos soberanistas la derrota colosal de Mas tuvo, en los primeros momentos, un aire de fracaso de la causa. Luego, finalmente, no fue así en absoluto.

Cualquiera que sepa sumar verá que las cosas no han cambiado sustancialmente, aunque los titulares de los medios afectos a los dos bandos contendientes se empeñaran - en sus ediciones digitales - en inclinar marcadamente la balanza hacia su lado que reprimieron posteriormente (excepto los más exaltados) en sus titulares impresos. Ello demuestra, en primer lugar, la pésima catadura del periodismo de España y Catalunya y, en segundo, la conversión de muchos antaño respetable periódicos en vulgares tabloides. Ya empiezan a surgir ensayos hablando de la "crisis del periodismo": en el seguimiento de sus valoraciones en la Red encontrarían pruebas de sobras.

En los comentarios que uno ha podido escuchar esta mañana, la sorpresa camina pareja con la sensación de que todo se ha complicado un poquito más todavía y que pronto volverá a haber elecciones. Sin embargo, la lectura que los medios afectos al Antiguo Régimen están realizando en Madrid se aleja aun más de la realidad que los del Polo Soberanista: ni siquiera saben sumar...

El País titula "El plan de Mas se hunde en las urnas" (inexacto: naufraga Mas, no su plan); El Mundo: "Mas entra en la Historia. Protagoniza el mayor ridículo electoral en 30 de años de historia de política autonómica" (hiperbólica aunque correcta la segunda parte; la primera tirando a lamentable, para ser suave); La razón: "Adéu Mas, a Cataluña le gusta España" (delirante); ABC: "Mas pierde su plebiscito" (escorado); La Vanguardia: "Duro castigo a Mas" (sorprendentemente apropiado); El Punt/Avui: "No em falleu" (tendencioso); Ara: "Mas no ho podrà fer sol" (correcto pero escorado); El Periódico: "Batacazo" (tirando a escorado).