27 de marzo de 2015

Catástrofe y relativismo moral


Con las debidas precauciones y consciente, cree uno, de lo que hay de demagogia y falacia ad populum en el uso, ahora, de la catástrofe del vuelo de Germanwings para fundamentar un juicio ético, a la luz de las investigaciones publicadas y dándolas por buenas, fiables y desinteresadas, nos encontraríamos ante un caso de universalidad ética posible: la conducta de un determinado individuo es, objetivamente, calificable como "mala" y susceptible de ser respaldada, inicialmente, por todos los seres humanos. Es probable, además, que nadie dudara en exigir un castigo por ella mientras que la de los otros 150 individuos no puede ser reprobada y puede calificárseles, sin duda, de "inocentes". Respecto a unas determinadas circunstancias, por supuesto, pero el relativismo moral queda severamente desacreditado en sus mismos principios ante la existencia de un enunciado que puede reclamarse como adoptable por una comunidad ética universal.