16 de diciembre de 2010

16 de diciembre de 2010: de cómo la delincuencia infantil acaba deviniendo delincuencia


Sonreía el otro día-y comentaba aquí- ante la emoción con la que mi hijo describía las fechorías del comercio ilegal de galletas Oreo y el robo de Kinder Bueno y concluía, sin demasiada seriedad, que entre el mundo de los niños y el de los adultos la diferencia es de grado. Bien, será que es así. La pareja de jóvenes aprendices de delincuentes que se dedicaba a la trata de galletas ha sido expulsada dos semanas del colegio por haber hurtado cutro teléfonos móviles y siete euros. En unos días han dado un salto cualitativo que quizás ya debería ser tomado en serio.

La cara que se le queda a veces a uno...