Anoche,
Zero Dark Thirty de Kathryn Bigelow, una gran decepción después de películas como
Días Extraños o
El peso del agua. Hace algún tiempo uno se hizo eco de
la crítica que a Žižek le mereció En tierra hostil y trató de argumentar en favor de la directoria estadounidense. En esta ocasión, poco se puede aducir en su favor más allá de que muestra, sin paños calientes, el propósito ejecutor y vengativo de la caza de Bin Laden. Por lo demás, demasiados elementos del repertorio básico del cine bélico-patriota norteamericano dominante. Tantos que llega a producir un cierto sonrojo. En fin, más de dos horas perfectamente prescindibles...