Uno tenía pensado esperar hasta llegar a las 200,000 visitas de robots y humanos a este lugar pero al final la falta de actividad ha provocado una caída del ritmo de lectores diarios que alargará demasiado la consecución de esta cifra así que mejor cortar por lo sano. La escritura del nuevo poemario,
Rememoración, ya hizo difícil seguir el habitual ritmo de publicación de observaciones y notas de este cuaderno. Un nuevo proyecto, la revisión de un antiguo ensayo que Viktor Gómez tiene la intención de publicar en Amargord, no ha hecho sino entorpecerlo aun más. Asimismo, este volver a adentrarse en la escritura de largo aliento ha implicado la recuperación de un ritmo más pausado de reflexión que introduce una distancia con la vivida inmediatez del "ahora" y sus urgencias cuyo valor para el pensamiento y la construcción literaria se está revelando, conforme avanzan los días, tan beneficioso que uno se pregunta cómo pudo ceder con tanta asiduidad a las pretensiones de la respuesta rápida, el análisis apresurado y la prosa descuidada. Han sido ocho años de atención continuada y próxima en los que uno ha compartido más de un millar de textos escritos a vuela pluma que, en el archivo en el que desde hace un tiempo empecé a recopilar, sumaban el otro día tres mil páginas. Muchas sin las debidas correcciones, sin los matices convenientes, los detalles imprescindibles, las revisiones necesarias... Demasiadas con bruscos cambios de estilo, tono o tema desde el retrato aséptico del entorno a la evaluación política, desde la crítica literaria al diario o el dietario, desde la confesión a la discusión... Demasiados comentarios apilados sin la precisa estilización, sin ese montaje, ese modelaje que no es sólo una elección estética sino ética, política. Es el momento de parar por una temporada y tal vez revisar lo escrito estos últimos años a ver si hay algo que soporte el tiempo acontecido. Además hay que concluir el ensayo, ponerse manos a la obra con los trabajos previos de otro poemario que está por ahí rondándole a uno, hacer la revisión definitiva de
Rememoración y ponerlo en circulación... Es mejor hacer un alto en este camino por el momento. Gracias a todos.
Gracias a ti. Es una pena para nosotros, tus lectores; pero deseo que sea una buena etapa para ti.
ResponderEliminarHasta siempre. Saludos de una lectora, Pilar.
Pero que sea temporal. Suerte con esos proyectos.
ResponderEliminarSalud y suerte, querido Jorge. Se comprende perfectamente lo que dices. No obstante, echaré de menos eso que llamas "respuestas rápidas, análisis apresurados y prosa descuidada". Ojalá todas las respuestas rápidas, análisis apresurados y prosas descuidadas de este mundo fuesen tan atentas, meditadas y bien escritas como las tuyas.
ResponderEliminarUn gran abrazo.
Eduardo.
Ánimo y echaré de manos tus entradas en el blog... igualmente, espero seguir leyéndote... en papel. Abrazos, Agustín
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