Y, finalmente, gracias a la paciencia de José Navieras que soportó estoicamente mis últimas dudas, correcciones y rectificaciones de la contraportada,
Bajo la lluvia llegó esta semana a la imprenta. Espero que en breve esté en la calle. Después de Navidad me temo que habrá que hacer alguna presentación. Será una buena oportunidad de saludar a amigos y conocidos.
Por último: aparte de a las personas que amo, el libro está dedicado a Jorge Riechmann. Un día de estos explicaré por qué.