Aunque uno siguió con más devoción
Falcon Crest que
Dallas, J.R. Ewing fue, indiscutiblemente, un villano modélico pleno de matices y rico en detalles. Con la muerte de Larry Hagman otro referente de mi época de formación, más, de mi educación sentimental, deja este valle un poco más vacío.
Afortunadamente, pervive en la memoria. No ha desaparecido absolutamente, de una vez por todas.