Últimamente, uno le está cogiendo el gusto a dejar que otros hagan el trabajo que se había propuesto realizar. Así, cada vez escribe menos sobre "Educación" porque demasiado a menudo
Alberto Royo dice lo que uno iba a escribri, pero antes y mejor así que ¿para qué repetirse con el riesgo añadido de quedar a la altura del betún en la comparación?
Pues eso. En esta ocasión, hace unos días Alberto
habló sobre lo que algunos han llamado la
"Pedagogía de la exigencia". Lo que ha publicado lo subscribo plenamente.